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Nada parece que vaya a frustrar las ambiciones de Louis XIV de expandir su imperio e imponer su poder en toda Europa tras haberse hecho cargo del asunto del envenenamiento y ser el vencedor en la guerra contra Holanda. El pueblo se cansa de pagar y las revueltas no paran de crecer dentro de los muros de Versailles. Influenciado por su nueva amante, Madame de Maintenon, el rey presume de un absolutismo que causa discrepancias en la Corte. Louis tolera cada vez menos disidencias, pero una nueva amenaza se cierne sobre el monarca: un misterioso prisionero escondido tras una máscara de hierro. |